CÓMO MANEJAR LOS PENSAMIENTOS DE IMPOTENCIA (POST 194 DE INTELIGENCIA EMOCIONAL)


Queridos amigos, el tema de hoy es “Como manejar los pensamientos de impotencia” y va dedicado con mucho cariño a Walter, Julia, Esperanza y Olga, quienes esperan este post. 

Ante la presencia de un problema sin aparente solución eficaz y pronta, surgen pensamientos inevitables, la mayoría de ellos son de impotencia porque quien los padece siente que no sabe hacer frente a la situación, los temores e inseguridad le roban la paz y los días pueden trascurrir de manera estéril si la forma de ver y asumir tales problemas no reciben un cambio.

Por ello, desde Zéfiro veamos cómo afrontar la llamada impotencia emocional.
Ante la presencia de un problema debes buscar calma y pensar de manera objetiva lo siguiente.

a)    Las causas reales del problemas: No las que imagines, no las que te digan, solo las que te consten y puedas cotejar con hechos y acciones concretas. No permitas que los temores y ansiedad te impidan asumir la realidad, solo así podrás hallar salidas concretas en cualquier arista de tu vida.
b)    Asumir tus responsabilidades en la causa del problema: Es probablemente la parte más complicada cuando las personas no desean asumir sus errores con humildad, cuando antes de hacerlo prefieren culpar a la otra u otras personas antes que admitir que han fallado.
c)    Pensar con objetividad en los errores de la o las otras personas que también generan un conflicto o problema.
d)    Tener claras las consecuencias presentes y posibles más delante de no resolverse el problema.
Muchas personas se quedan en el primer paso o solo piensan en las consecuencias y es entonces que la impotencia los invade, surgen pensamientos de desesperación, desesperanza, miedo, ira, frustración y los pensamientos giran hacia lo mismo, no hay cambios ni acciones concretas que contribuyan a que los problemas evoluciones y se resuelvan de algún modo o por lo menos desaparezca esa sensación de aflicción y angustia y melancolía que embarga a millones por días y años. 

Cuando los pensamientos de impotencia de perturben si realmente quieres tener paz y resolver los problemas que te agobian debes DECIDIR con valor, voluntad, humildad, inteligencia y tino lo que harás, tomando en cuenta que elegir sufrir también es una decisión cuando te cubres de impotencia y falta de fuerzas porque no quieres avanzar ni vivir mejor.

PENSAMIENTOS DE IMPOTENCIA COMUNES.
-       No seré capaz de tal o cual cosa a nivel laboral, siempre fracaso, mejor no lo intento (y solo piensas en eso)
-       ¿Por qué las cosas no fueron mejor?, ¿por qué no hice o dije tal cosa?
-       No sé por dónde empezar, ¿qué digo?, ¿qué no digo? ¿y si la friego peor?
-       No soporto que tal o cual persona haga esto o aquello, me da rabia, ira, celos, me pone de mal humor.
-       ¿por qué me pasó esto a mi?, ¿por qué no me di cuenta de todo antes?
-       etc, etc
- Si hubiese tenido más tiempo para hacer mejor las cosas y demostrar lo que puedo lograr. 
 
PENSAMIENTOS Y ACTITUDES PARA VENCER LA IMPOTENCIA.
a)    No maximizar  ni tratar de imaginar lo que la o las personas involucradas podrán decidir frente a un conflicto. Puedes hacer uso de la percepción, pero ojo que si estás tenso, ansioso y deprimido, esta no surgirá ni atinarás a nada porque solo generas pensamientos negativos que en el fondo son porque temes avanzar hacia una solución.
b)    No esperar que los demás te resuelvan los problemas o se hagan cargo de tus decisiones. Esta situación suele darse cuando dejas que personas ajenas al problema opinan y te llevan a decisiones equivocadas.  Por ello recuerda siempre que pidas un consejo hacerlo a gente sabia, es decir honesta, juiciosa y que jamás te diría hacer algo incorrecto para ti y para los demás, gente con ética, respeto y bondad hacia los demás.
c)    Alejar la idea y estrategia que dice “Que pase el tiempo, vendrán  mejores vientos ”. Muchas personas deciden esta estrategia con la idea errónea y cliché de que los problemas se enfrían y los conflictos se resuelven por arte de magia con el tiempo que pasa, como si las  partes involucradas no tuvieran memoria ni pensaran. Por lo general ocurre que este tipo de actitudes funciona para problemas pequeños o malestares sin real fondo profundo, no para conflictos más complejos, donde relaciones humanas se han resquebrajado.
Cada día es algo distinto y la vida puede cambiar tan solo en minutos. Por tanto quienes piensan así corren el riesgo de no poder resolver su conflicto  a tiempo porque será inviable por factores que no es capaz de prevenir. La vida es un camino donde hay que decidir todo el tiempo, tomar riesgos, asumir que el temor es parte del camino y sobre todo que las relaciones humanas son como las plantas, se deben cuidar siempre porque como las plantas que muere, si se pierde la admiración, el respeto y la confianza y consideración no es posible solucionar problemas de cualquier índole a nivel familiar, laboral, afectivo, etc.
d)     No abusar de la nobleza y bondad de los demás: Un ejemplo claro de esto se da cuando por ejemplo los padres se llena de dolor e impotencia ante las irresponsabilidades de sus hijos así como de su desamor y por lo general los hijos inmaduros y egoístas asumen tarde sus errores, cuando el tiempo les arrebató la posibilidad de enmendar errores, quedando entonces ellos impotentes y con un cargo de conciencia inmenso, al punto que en puede enfermarlos.
También puede darse cuando decides abusar de la confianza o nobleza de la o las personas a las que les fallaste y consideras que tienen que perdonártelo todo o que lo mereces todo y si un día te dicen “No” te llenas de impotencia, no asumes las consecuencias de tus acciones y decides solo quejarte y amargarte.
e)    Recordar siempre que los demás no cambian porque tú quieres o deseas, lo harán si les nace, si tiene voluntad. De modo que deja la impotencia y reemplázala por comprensión, compasión y resignación cuando veas que los demás llevan valores endebles, mentes confusas y sobre todo cuando vivan encerrados en la necedad y decide caminar sin retroceder, caminar asumiendo tus responsabilidades ante los problemas con valor y de manera inteligente, con firmeza y sin titubeos porque así como es tan sencillo dañar o herir debe serlo aprender  a hacer las cosas de manera correcta sin que duela o cueste.
f)     Observa tus metas estancadas y tus sueños perdidos por causa de tu inmovilidad y vivir estancado en tus pensamientos de impotencia, lamentos: Lamer tu heridas, tener pena de ti mismo (a) no es la solución. Levanta la mirada, decide vivir con fuerza y fe y no pretendas que los temores desaparezcan porque serán una compañía con la que debes aprender a convivir sin que obstruyan tu camino y mucho menos te impidan ser tú mismo.
g)    Si pese a tus intentos no paran el sentir impotencia, busca ayuda profesional porque tanto tus niveles de ansiedad, baja autoestima y otros posibles problemas te impiden salir adelante.
h)   Elabora un plan de vida que incluya decisiones para resolver los problemas, recordando que si hay cosas que no depende de ti, nada puedes hacer algunas veces, pero si no es así y eres consciente de que puedes realizar tareas específicas para salir de los conflictos, hazlo con honestidad y buena voluntad.
Recuerden  que somos humanos y podemos fallar, equivocarnos, pero resulta penoso que si puedes pensar, usar tus talentos e inteligencia elijas vivir atado a tus inseguridades y sin compromiso y voluntad para madurar y buscar la felicidad que puedes construir con esfuerzo, fe y honestidad . La vida es muy corta y desde este blog siempre diré que la gente más valiosa es la que sabe hacer de sus errores un aprendizaje y del dolor fuerza para renacer y dar lo mejor de sí.

Vivir atado a los pensamientos de impotencia enferma el cuerpo y la mente, debilita, desmotiva y estamos hechos para avanzar siempre, si eliges vivir solo en el caos se te va la vida, se te van los sueños y dejas de tener paz. Por tanto, busca reemplazarlos por pensamientos pro activos, de soluciones porque la gente inteligente resuelve, no mira su vida pasar por una ventana y luego lame sus heridas en la vejez.
Ya lo saben Zeferinos, si la impotencia los agobia: ¡actúa, muévete, despabílate¡   y deja de mirar solo lo que cayó del vaso porque cuando reacciones los mejores días de tu vida estarán muy lejos de ti. 

Ahora les dejo esta cancioncita para conocedores, espero los acompañe y les agrade.

Que tengan un lindo fin de semana y los ángeles los apoyen en todo paso nuevo que busquen dar. 

Manjarí (bendiciones)


4 comentarios:

Francisco dijo...

hermoso tu blog, hermosas tus palabras, hermosa toda tu ¡Felicitaciones por tu gran labor Rosa Maria! no se si te acuerdes de mi, trabajo en la Municipalidad de Lima y tu estuviste en el área cultural hace años y nunca te hablé xque siempre te veia pasar corriendo por los eventos pero te veo en tele a cada rato tan guapa como entonces
espero acudir a tu taller y tal vez me recuerdes tu post me ayuda a ver cosas q no pensaba tienes toda la razón

Anónimo dijo...

muy bueno
gracias por todo los que escribes llegas muy fuerte al corazón

Laura dijo...

Tus palabras són increibles, me quedo perpleja cada vez que termino de leer un parrafo. Pues tienes tanta razón en lo que dices...mi pareja muchas veces me explica que su abuela cuando él era pequeño, en situaciones le decía "no te hagas hígado por algo que ya pasó, o no llores sobre leche derramada" y yo cada vez que me lo dice me enfado porque pienso que no entiende que necesite nombrar algo que me dolió durante un par de días o incluso a veces más.
Y es que pensandolo friamente, al leerte he visto que lo hace porque no quiere que sufra por cosas en las que ya no se puede reparar, o para que no pierda el tiempo por cosas que no tienen importáncia, porque cada día habrán problemas que deberé resolver por mi misma, y no podré estar lamentandome por aquello hasta que me reponga y coja fuerzas suficientes de nuevo para tirar adelante...

Gracias por abrir los ojos a una personita más, cuanto quisiera poder conocerte y aprender de tí Rosa Maria, espero que no te moleste que te llame por tu nombre a pesar de no conocerte, pero es que has hecho que te admire como a pocas personas he llegado a admirar en estos 19 años de mi vida.
Sé que me queda mucho por aprender,y de seguro que lo voy a hacer, porque no quiero quedarme estancada y más adelante pensar lo que pudo ser y no fué.

Por último me gustaría decirte que uno de mis sueños desde hace más de 2 años es ir a Perú, pues da la casualidad de que mi pareja es de allá, y no deja de contarme mil anecdotas y cosas lindas sobre vuestro país.
Espero poder ir algún día y si no es posible verte durante mi estancia, me encantaría poder escribirte y contarte como lo viví.

Gracias una vez más.


Laura.

Anónimo dijo...

Excelente reflexión, muy útil y acertada. Gracias