Queridos amigos, el tema de hoy es “La importancia de
mirarse por dentro” y va dedicado con mucho cariño para Guillermo, André,
Esther y July, quienes esperan este post.
Mirarse es la capacidad del ser humano de decidir
conocerse, reflexionar y develar si lo que siente, piensa, cree y necesita
están en armonía; es además reconocer con humildad y valor aquellas actitudes,
estilos de vida y decisiones que no son correctas, justas ni nobles para
consigo mismo y con los demás.
La receta de felicidad que venden los medios de
comunicación es cuantitativa: Mucha gente cree que solo invirtiendo tiempo en
acumular posesiones, objetos y perteneciendo a cierto grupo social podrá ser
exitoso y logrará sentirse feliz.
Ocurre
que hay grupos de personas en todo el mundo que ni logrando lo descrito son
felices porque no tienen claro lo que necesitan emocionalmente o no saben
manejarse para sentirse en armonía.
Por ello, desde Zéfiro veamos juntos las claves para
aprender a mirarse y buscar el equilibrio emocional:
¿POR DÓNDE EMPEZAR A MIRARSE?
1.- Observa y anota todo lo que piensas de ti mismo: Toma
una libretita de apuntes, ingresa a un lugar calmado y privado o si deseas sal
al parque y escribe con orden todo aquello que pienses acerca de ti mismo en
diversas aristas. Puedes empezar por lo profesional, luego sobre tu relación
con el entorno y amigos, luego en el plano afectivo y al final o en el orden
que gustes sobre tu relación contigo
mismo.
Ten en cuenta que según como sea tu perfil de
personalidad y autoestima todo lo que anotes será la clave para saber que pasa
contigo por dentro.
2.- Reconoce todas aquellas situaciones que te causan
dolor y sufrimiento: Y al costado de cada una anota si es por impotencia, ira,
injusticia, fatalidad y ego. Es casi seguro que si logras reconocer que por ego
ciertas conductas y actitudes hoy te hacen sufrir te sientas más mortificado,
pero sigue adelante y continúa tu auto inspección.
3.- Enumera todas aquellas conductas y actitudes que has
tenido acerca de otros con el fin de mortificar, retar, vengarte, competir, por
envidia, por celos y por miedo. Si son demasiadas personas y demasiadas
situaciones, ordénalas por rubros (familia, amistades, compañeros, conocidos,
etc).
4.- Escribe todos aquellos talentos que posees y te
gustaría desarrollar, pero no sabes cómo y te gustaría hallar la forma: Una vez
que lo sepas te queda echar manos a la obra con esto (Investigando, decidiendo,
agendando y sobre todo poniendo mucha alegría, pasión y alegría por hacer algo
que siempre has soñado).
5.- Describe todos tus temores: Y enuméralos por a)
aprendidos (por tus padres, entorno, etc) b) Los que te vienen del fondo de ti
por tu inseguridad (miedo a decidir, miedo al rechazo, miedo a afrontar ciertas
situaciones, miedo a ser tú mismo. Este punto es esencial porque una vez que
tengas claro cómo van tus miedos dentro de ti podrás reconocer con más humildad
las consecuencias terribles de no buscar
manejarlos. Y es que quien no maneja sus miedos puede ser agresivo, apático,
introvertido, conflictivo, etc).
6.- Escribe el concepto que tú tienes de felicidad: Y
sino lo tienes claro, tendrás que entrenarte y buscar aprendizaje emocional
para descubrirlo. Y como todo en la vida es una decisión, pero si la tomas y
eres constante ten por seguro que te sentirás en paz contigo mismo.
7.- Reconoce todas aquellas situaciones, estilos de vida
y personas o grupos de las que te gustaría alejarte porque solo te traen dolor,
molestia, irritabilidad, o sientes que no te dejan salir adelante, te perturban
y contribuyen a sentirte infeliz: Tal vez deseas cambiar de trabajo, mudarte,
romper alguna relación afectiva dañada, etc y si es así anota por qué no lo has
hecho hasta hoy, todo aquello que te lo impida desde la perspectiva del temor.
Es casi seguro que si no estás acostumbrado a meditar la
primera vez que lo intentes no llegues ni a llenar ni la segunda lista porque
te quedaste pegado recordando cosas dolorosas o te comenzaste a sentir mal y
decidiste echarte para atrás. Y es lógico y comprensible, pero debes agendar
otro día para seguir el proceso y con el tiempo y la práctica será más
sencillo, liberador y de gran ayuda para tu constante renacer como persona.
Toma en cuenta que la insatisfacción, sufrimiento, ira,
rabia, melancolía y todas aquellas emociones que no manejes impiden que puedas
crecer, tomar decisiones, sentirte seguro y tener relaciones humanas saludables
y por lo general las personas sufren cuando no saben pensar, cuando por
inmadurez, temores y sobre todo prejuicios y actitudes aprendidas solo se les
ocurre mirar las cosas por un lado.
Por ello, aprender a mirarse resultará esencial para
buscar equilibrar todo aquello dentro de ti que impide elegir el tipo de vida
que realmente anhelas y como todos mereces y tienes derecho a construir. Y si
no lo asumes y lo postergas y esperas sentirte peor, perder cosas valiosas en
el camino y quebrar relaciones humanas en todas las esferas de tu vida para
percatarte de ello tarde, asume que es tu responsabilidad y eres preso del ego y
necedad. Recuerda que la inteligencia es la capacidad de resolver problemas de
modo saludable por vías correctas que ayuden a sentirte bien contigo mismo y el
entorno.
Busca aprender a cultivarte, rodearte de herramientas que
te ayuden a ser mejor persona: leer buenos textos, tener amistades personales
de valores y bondad, estudiar y prepararte en todo aquello que te haga mejor
persona y te otorguen dicha, escuchar gente sana de alma y sabia para aprender, compartir, buscar en los orígenes
de tu sangre y familia todos aquellas enseñanzas que pueden servirte de guía o
con las que tal vez puedas tú mismo servir.
Por último, se agradecido con Dios y con la vida por cada
cosa buena que hay en tu vida, por los talentos recibidos, por las múltiples
bendiciones que recibes cada día tan solo al abrir los ojos y poder ver el sol
por tu ventana, la luna por la noche y las estrellas indicándote que como ellas
en abundancia son los regalos del cielo para la gente de fe.
Mirarse es una actitud de personas de fe, valientes y
generosas que reconocen la necesidad de vivir puliendo todo aquello que robe
luz al alma para poder vivir en armonía y feliz porque no nacimos para ser
infelices, pero como todo en la vida es una decisión y una actitud a elegir
conocer y desarrollar.
Nadie puede librarse del dolor y sufrimiento merecido, no
merecido, de la fatalidad, pero en cada episodio de la existencia que ocurren
lo importante es que logremos salir de tal situación tomando decisiones
juiciosas y honestas. Vivir y elegir por la vía del sufrimiento absurdo es en
miles de casos un asunto de ignorancia emocional, acallar al alma que siempre
grita lo que necesita y carecer de fe en si mismo para renovarse.
Recuerda Zeferino que siempre podrás ser incomprendido,
juzgado, señalado y cuestionado por tu forma de ser, proceder y expresarte,
pero si cada cosa que haces, dices y decides nace de tu autenticidad nada
temas, sigue caminando, comprendiendo, compadeciendo y sobre todo teniendo
claro que los apegos y discusiones absurdas con personas que son densas, conflictivas
o buscan mortificar la existencia solo son circunstancias y enseñanzas del
camino. Por siempre fuimos bendecidos con la capacidad de elegir cambiar de
rumbo cada que sea necesario y cuando
sientas que tus talentos y espíritu son maniatados.
Ahora les dejo esta cancioncita para que los acompañe,
espero les agrade.
Que tengan un día donde los talentos que más necesitan
hoy los ayuden a encontrar la solución para sus problemas más apremiantes y los
ángeles les coloquen en el camino las personas indicadas para apoyarlos.
Manjari (bendiciones)
2 comentarios:
me hacia mucha falta leer algo asi
¡GRACIAS!
Buff... yo sin embargo pienso, que todo esto no sirve para nada, si por ejemplo, tienes un entorno que no te permite ser como tú quieres ser. Eso pasa muy a menudo. Uno puede ser tal y cómo quiera ser, siempre que tenga un entorno propicio para ello.
Saludos!!
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